Monición de entrada. Domingo 2º de Pascua, Ciclo A. "JESÚS SE APARECE A SUS DISCÍPULOS REUNIDOS"


Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «Paz a vosotros». Y, diciendo esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: «Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo.» Y dicho esto, exhaló su aliento sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos.» Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: «Hemos visto al Señor.» Pero él les contestó: «Si no veo en sus manos la señal de los clavos y no meto mi dedo en el agujero de los clavos y no meto mi mano en su costado, no lo creo.» A los ocho días, estaban otra vez sus discípulos dentro y Tomás con ellos. Llego Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y les dijo: «La paz a vosotros.» Luego dijo a Tomás: «Trae aquí tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado, y no seas incrédulo sino creyente.» Contestó Tomás: «Señor mío y Dios mío.» Jesús le dijo: «Porque me has visto has creído. Dichosos los crean sin haber visto.» Muchos otros signos, que no están escritos en este libro, hizo Jesús a la vista de sus discípulos. Éstos se han escrito para que creáis que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que creyendo tengáis vida en su nombre. (Jn. 20, 19-31)

Diálogos desde el Evangelio. Domingo 2º de Pascua A

"Santana Motor, un cierre programado", por Sebastián Martínez

Sebastián Martínez es militante de la HOAC y ex-trabajador de Santana. Desde su experiencia de años en la pastoral obrera y en la propia empresa, nos presenta aquí una reflexión acerca de los acontecimientos que han desembocado en el cierre de la emblemática factoría linarense.

Fotos de la Vigilia Pascual de 2011

Podéis verlas en este enlace.

VIACRUCIS de SAN JOSÉ de LINARES

Os dejamos aquí el Via Crucis que para la Semana Santa del 2011 ha preparado Melitón, con las imágenes de las estaciones que Esperanza ha recreado en los preciosos azulejos que están en nuestra renovada iglesia. Os dejamos también el el pdf en este enlace por si queréis imprimirlo.



Monición de entrada. Domingo de Resurrección, Ciclo A.

El primer día de la semana, María Magdalena, fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien tanto quería Jesús, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto”. Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y asomándose vio las vendas en el suelo: pero no entró. Llego también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio las vendas en el suelo y el sudario con el que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro, vio y creyó. Pues hasta entonces NO habían entendido la Escritura: que Él había de resucitar de entre los muertos (Jn. 20, 1-9)

Diálogos desde el Evangelio. Domingo de Resurrección A

Diálogos desde el Evangelio. Domingo de Ramos A

Monición de entrada. Domingo de Ramos, Ciclo A. "DOMINGO DE RAMOS EN LA PASIÓN DEL SEÑOR"

Cuando se acercaba a Jerusalén y llegaron a Betfage, junto al monte de los olivos, Jesús mandó dos discípulos, diciéndoles: “Id a la aldea de enfrente, encontraréis enseguida una borrica atada con un pollino, desatadlos y traédmelos., Si alguien os dice algo, contestadle que el señor los necesita y los devolverá pronto”. Esto ocurrió para que se cumpliese lo que dijo el profeta: “Decid a la hija de Sión: “Mira a tu rey, que viene a ti, humilde, montado en un asno, en un pollino, hijo de acémila””. Fueron los discípulos e hicieron lo que les había mandado Jesús: trajeron la borrica y el pollino, echaron encima sus mantos, y Jesús se monto. La multitud extendió sus mantos por el camino; algunos cortaban ramas de árboles y alfombraban la calzada. Y la gente que iba delante y detrás gritaba: “!Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en el cielo!”. Al entrar en Jerusalén, toda la ciudad preguntaba alborotada: “¿Quién es éste?”. La gente que venía con Él decía: “Es Jesús, el Profeta de Nazaret de Galilea”. (Mt. 21, 1-11)

"¿ESTADO ACONFESIONAL?, ¿ESTADO LAICO O LAICISTA?, ¿ESTADO O SOCIEDAD LAICA?", por Antonio Molina Contreras

Estos días hemos escuchado a ZP anunciar que no se presenta a las próximas elecciones, pero que piensa seguir hasta terminar la legislatura. Es decir, tiene muy claro su proyecto y no piensa ceder ni un solo milímetro: establecer el laicismo como la religión de la sociedad española, confundiendo SOCIEDAD con ESTADO, es decir, sosteniendo que el que no piense como ellos está de sobra. Esto es un error tremendo, que da al traste con todas las libertades y los derechos fundamentales de las personas. Pero lo malo no es que un grupo determinado se levante pensando así y confundiendo las cosas, lo peor es que el horizonte y las perspectivas no parecen que vayan a cambiar mucho, con lo que si eso se establece como norma, al final iremos quedando como muñecos en manos del que venga imponiendo cada uno lo que se le ocurra.

Creo que vale la pena el que nos detengamos a pensar un poco para tener las ideas claras y de acuerdo a eso podamos hablar y decidir. LA VERDAD siempre es base para la LIBERTAD. Jesús lo dijo de otra manera más linda: “LA VERDAD OS HARÁ LIBRES”, por eso la MENTIRA y la distorsión siempre llevan a la confusión y a la muerte.

Quiero recoger estos artículos de un gran amigo: ANTONIO MOLINA CONTRERAS, que nos ayudan a situarnos, y desde aquí quiero darle las gracias, porque su reflexión, como hombre preparado, es de un gran valor y ayuda para todos nosotros.

Melitón

Monición de entrada. Domingo 5º de Cuaresma, Ciclo A. "LA RESURRECIÓN DE LÁZARO EN BETANIA"

Estaba entonces enfermo un hombre llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de su hermana Marta. María era la que ungió al Señor con perfume y secó sus pies con sus cabellos. Y Lázaro, que estaba enfermo, era su hermano. Entonces sus hermanas enviaron para decir a Jesús: "Señor, he aquí el que amas está enfermo." Al oírlo, Jesús dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios; para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se quedó aún dos días más en el lugar donde estaba; y luego, después de esto, dijo a sus discípulos: Vamos a Judea otra vez. Le dijeron sus discípulos: Maestro, hace poco los judíos procuraban apedrearte, ¿y otra vez vas allá? Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas? Si uno camina de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo. Pero si uno camina de noche, tropieza porque no hay luz en él. Habiendo dicho estas cosas después les dijo: Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy para despertarlo. Entonces dijeron sus discípulos: Señor, si duerme, se sanará. Sin embargo, Jesús había dicho esto de la muerte de Lázaro, pero ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño. Así que, luego Jesús les dijo claramente: Lázaro ha muerto; y a causa de vosotros me alegro de que yo no haya estado allá, para que creáis. Pero vayamos a él. Entonces Tomás, dijo a sus condiscípulos: Vamos también nosotros, para que muramos con él. Cuando llegó Jesús, halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro. Betania estaba cerca de Jerusalén, como a quince estadios, y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María para consolarlas por su hermano. Entonces cuando oyó que Jesús venía, Marta salió a encontrarle, pero María se quedó sentada en casa. Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. Pero ahora también sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará. Jesús le dijo: Tu hermano resucitará. Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la Resurrección en el día final. Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí no morirá para siempre. ¿Crees esto? Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que había de venir al mundo. Y cuando hubo dicho esto, fue y llamó en secreto a su hermana María, diciendo: El Maestro está aquí y te llama. Ella, cuando lo oyó, se levantó de prisa y fue a donde él estaba; pues Jesús todavía no había llegado a la aldea, sino que estaba en el lugar donde Marta le había encontrado. Entonces, los judíos que estaban en la casa con ella y la consolaban, cuando vieron que María se levantó de prisa y salió, la siguieron, porque pensaban que iba al sepulcro a llorar allí. Luego, cuando María llegó al lugar donde estaba Jesús y le vio, se postró a sus pies diciéndole: Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano. Entonces Jesús, al verla llorando y al ver a los judíos que habían venido junto con ella también llorando, se conmovió en espíritu y se turbó. Y dijo: ¿Dónde le habéis puesto? Le dijeron: Señor, ven y ve. Jesús lloró. Entonces dijeron los judíos: Mirad cómo le amaba. Pero algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los ojos al ciego, hacer también que Lázaro no muriese? Jesús, conmovido otra vez dentro de sí, fue al sepulcro. Era una cavidad cubierta con una losa. Jesús dijo: Quitad la losa. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque tiene cuatro días. Jesús le dijo: ¿No te dije que si crees verás la gloria de Dios? Luego quitaron la piedra, y Jesús alzó los ojos arriba y dijo: Padre, te doy gracias porque me oíste. Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la gente que está alrededor, para que crean que tú me has enviado. Habiendo dicho esto, llamó a gran voz: ¡Lázaro, ven afuera! El muerto salió, los pies y las manos atadas con vendas, y la cara envuelta en un sudario. Jesús les dijo: Desatadlo y dejadlo andar”. Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en Él. (Jn. 11, 1-45 )

Diálogos desde el Evangelio. Domingo 5º de Cuaresma A